Una media engañosa
En 2013, Estados Unidos registró 10,3 muertes relacionadas con accidentes de tráfico por cada cien mil habitantes. Este dato convierte a Norteamérica en el país desarrollado con mayor número de fallecimientos en las carreteras, tanto en términos relativos como absolutos, y el mayor número de accidentes de tráfico. Sin embargo, esta media nacional esconde notables diferencias entre los distintos Estados del país. No en vano, si en Massachussetts el dato se reduce a 4,9 muertes por cada cien mil habitantes con 309 accidentes mortales, en Montana se dispara hasta 22,6 con 203 siniestros.
Texas, el más mortífero en términos absolutos
Texas, el mayor Estado del país en lo que a superficie se refiere, es también el que registra un mayor número de accidentes mortales al cabo del año. En 2013, 3.044 de los percances en carretera se saldaron con víctimas mortales, dejando el número de fallecidos en el asfalto del gran Estado sureño en 3.382 personas. Con todo, debido a la población de Texas (algo más de 26 millones de habitantes) el número de muertes en carretera por cada cien mil residentes es de 12,8 personas.
Montana, el dato relativo más elevado
Aunque el dato referente al número de accidentes mortales en Montana pueda parecer modesto (203), hay que tener en cuenta que el Estado de las Montañas Rocosas cuenta con poco más de un millón de habitantes, lo que deja una cifra relativa muy considerable (22,6 fallecimientos por accidente de tráfico por cada cien mil habitantes). Este Estado también tiene el nivel más alto de muertes por cada cien mil kilómetros recorridos (1,96 fallecimientos). Por consiguiente, el Estado del noroeste es uno de los más peligrosos para conducir en Norteamérica.
El sur, el punto más negro
De manera bien reveladora, casi todos los Estados sureños superan la media nacional de accidentes y fallecimientos en relación con el número de habitantes. Tennessee (911 accidentes mortales), Virginia (682), Georgia (1.085), Carolina del Norte (1.188) o Florida (2.228) son buenos ejemplos además del ya analizado caso de Texas. En cuanto al número de muertes por cada cien mil habitantes, Mississippi (20,5), Alabama (17,6), Arkansas (16,3), Carolina del Sur (16,1), Carolina del Norte (16), Tennessee (15,3), Louisiana (15,2) y Florida (12,3) vuelven a empujar hacia arriba la media del país.
California y Nueva York: malos datos absolutos pero buenas cifras relativas
California registró 2.772 accidentes que se cobraron la vida de tres mil personas. No obstante, hay que ponderar debidamente que se trata del Estado más poblado del país (38 millones de habitantes), por lo que el número de fallecimientos en carretera por cada cien mil habitantes se queda en 7,8 personas. Otro tanto ocurre con el norteño Estado de Nueva York (casi veinte millones de residentes), cuyos 1.121 accidentes mortales (con 1.199 muertes) se traducen en 6,1 fallecimientos por cada cien mil habitantes.
